Este fin de semana adorné unas velas con washi tape. No es ningún secreto que este material tiene infinitas posibilidades y que se puede utilizar para embellecer casi cualquier cosa que se nos ocurra, de hecho, desde que lo descubrí me tiene totalmente enganchada y es que con un rollo puedes transformar los objetos por poco dinero y sin esfuerzo.
Con unos sencillos botes de cristal (éstos son de unos yogures, más barato imposible, y es que guardarlo todo tiene su recompensa), unas velas pequeñas y un par de rollos de washi tape en tonos dorados, se consigue un resultado precioso.
En el segundo caso he elegido el negro y el blanco, y he añadido una puntilla negra autoadhesiva. Si la primera opción tenía un aire festivo, ésta es más sobria y elegante.
La tercera posibilidad es la más amorosa con unos washi tape llenos de corazones, ideal para una velada romántica.
Habéis visto lo rápido y fácil que es utilizarlos, y lo genial que queda. Esta es mi pequeña colección, y es que si fuera por mí, tendría millones. Ya estoy deseando volver a utilizarlos en cuanto pueda.
¡Feliz semana a todos!
Con unos sencillos botes de cristal (éstos son de unos yogures, más barato imposible, y es que guardarlo todo tiene su recompensa), unas velas pequeñas y un par de rollos de washi tape en tonos dorados, se consigue un resultado precioso.
En el segundo caso he elegido el negro y el blanco, y he añadido una puntilla negra autoadhesiva. Si la primera opción tenía un aire festivo, ésta es más sobria y elegante.
La tercera posibilidad es la más amorosa con unos washi tape llenos de corazones, ideal para una velada romántica.
Habéis visto lo rápido y fácil que es utilizarlos, y lo genial que queda. Esta es mi pequeña colección, y es que si fuera por mí, tendría millones. Ya estoy deseando volver a utilizarlos en cuanto pueda.
¡Feliz semana a todos!